martes, julio 06, 2010

Orientación Sexual

BIBLIOGRAFIA DE HOMOFOBIA Y HETEROSEXISMO
Parte 4



Por García Orozco Citlalli Berenice
UNAM
Facultad de Filosofía y Letras
Colegio de Bibliotecología y Estudios de la Información
Mat. Bibliografía
Prof. Patricia Espejel
4to Semestre - Periodo 2010-2
Febrero - Mayo 2010



Orientación sexual:[1]




Es el deseo sexo/afectivo por:

o    personas del mismo sexo (homosexualidad),

o    del sexo opuesto (heterosexualidad)

o    de ambos sexos (bisexualidad o ambisexual)[2].

o   Existe una cuarta, sin embargo, esta entidad está más condicionada por una combinación de factores biológicos y sociológicos y que tiene que ver con más de dos sexos y géneros: Pansexualidad (u Omnisexualidad)[3] o Pomosexual[4].

o    La quinta es la Asexualidad, es decir, la falta del deseo sexual o que no te gusta ningún sexo u otra cosa[5] o que no experimentan atracción sexual.


La diversidad no nos hace diferentes. De hecho en la diferencia está la igualdad. La orientación sexual o preferencia sexual no se sabe a ciencia cierta porque se produce o porque varía tanto, el problema es que mucha gente cree que es fija y que casi no varía de persona a persona. Al parecer no está en los genes pero parece que se puede heredar. ¿Es biológico o social?

Mucho me temo que es producto de ambos factores. Intentar institucionalizar y obligar a los individuos a que adopten una u otra es contraproducente (y digno de una especie cavernícola (y no altamente social y desarrollada) que le teme a los rayos porque no sabe que son (en nuestro caso, la sexualidad) Y entonces empieza a creer que dicho fenómeno tiene que ver con sequias, con desastres naturales, con poderes mágicos, con magia negra, con demonio y dioses… y termina temiéndose a sí mismo y a los individuos de las sociedades en donde están insertos.

Como se verá más adelante, la bisexualidad  y la Pansexualidad son sumamente variantes durante la vida de un humano a diferencia de una de las dos monosexualidades (homosexualidad y heterosexualidad) que son mucho más rígidas y menos variantes en la vida de un individuo. Es por ello que al movimiento LGTB, el de las feministas lésbicas y el movimiento del género  les extraña que la mayoría de la población sea solamente heterosexual.

El problema no solo llega hasta este punto. Sino que al comprender el género y la intersexualidad y la transexualidad la cosa se complica. Es decir, abría tres tipos de homosexualidad: la cromosómica, la corporal y la de género. En la primera, te atraerían los individuos de su sexo cromosómico, en la segunda te atraerían únicamente los individuos que tienen un cuerpo como el tuyo y en la tercera, te atraerían los individuos que se identifican con el mismo género con el que uno se identifica. La cosa se complica.

La invisibilizacion de las otra orientaciones sexuales por la institucionalización de una sola es un sexismo que en nuestro caso y en nuestra sociedad recibe el nombre de heterosexismo  porque el gobierno de las masas se rige mediante la heterosexualidad con fines de control social, económico o político haciendo creer a la gente que dicha preferencia es la natural y mayoritaria.


°º¤ø,¸¸,ø¤º°`°º¤ø,¸¸,ø¤º°`°º¤ø,¸ ¸,ø¤º°`°º¤ø,¸ ¸,ø¤º°


Asi “En 1985, el sexólogo Fritz Klein, elaboró una nueva tabla a partir de la de Kinsey, llamada ‘Cuadricula de orientación sexual de Klein’ que adopta variantes y factores que ni la escala de Kinsey, ni en las modificaciones sucesivas se habían tomado debidamente en cuenta. Notablemente, la tabla de Klein determina que el enamoramiento, el amor y el afecto no suponen necesariamente contacto sexual ni genital. Y subraya algo que [Riesenfeld pone de manifiesto a lo largo de su libro ‘Bisexualidades’:] la orientación sexual no es permanente ni estática y tiene distintas dimensiones.”[6] Klein pone de manifiesto siete dimensiones de la orientación sexual y a su vez divide cada una de ellas en pasado, presente y futuro.  Las cuales son:

§  Atracción sexual:  entendida como el fenómeno que nos quita el aliento y nos hace sentir cosquillas y mariposas en la panza cuando vemos, oímos, sentimos, olemos o tocamos a determinada persona.

§  Práctica sexual: Entendida como el número de parejas de un sexo y del otro que se hayan tenido, lo cual, no es lo mismo que la atracción.

§  Fantasía sexual: fantasía y atracción son dos áreas independientes entre sí. Por una o varias causas la persona solo fantasea.

§  Preferencia emocional: La vida emocional no siempre coincide con la sexual, ni con la práctica, ni con la fantasía. Algunos se enamoran con más intensidad de un sexo mientras que viven con más excitación las relaciones sexuales con el otro.

§  Preferencia social: Esta variable no se refiere al área de pareja sino a la socialización: ¿con qué sexo le resulta a uno más cómodo salir, convivir, hacer amistas?

§  Estilo de vida: Esta variable se refiere a la orientación sexual dominante en nuestros amigos, en nuestras actividades sociales y en los lugares a donde acudimos.

§  Autodefinición: Con que orientación sexual te defines o la identidad sexual que adoptas.[7]


La orientación sexual no es permanente ni estática, tiene distintas dimensiones (a excepción de la orientación sexual monosexual // pero tanto la bisexual como la monosexual se descubren a lo largo de la vida). Estas también pueden ir juntas pero no revueltas. Se pueden configurar de diferentes formas. Es decir, no son lo mismo para todos y son altamente variables.





o   ¿Todos somos Bisexuales?



Lo más grandioso de toda la historia de la sexualidad es que el humano ha empezado a darse cuenta de que es diverso y no monótono ni  uniforme. Lo ha puesto de manifiesto en su diversidad cultural como son los medios de comunicación e información, en sus expresiones, en su sociabilidad, así como en la ciencia y en el arte. El hecho de que la heterosexualidad se considere mayoritaria en términos de cantidad es debido al heterosexismo y no por una causa natural.  

“Según algunos especialistas la mayoría de las personas serían bisexuales si no fuera por la represión, el asco, la condena social y la negación[8]
El heterosexismo distorsiona el círculo de la sexualidad que marque más arriba y confunde los espectros de la sexualidad entre sí.[9] De esta forma es frecuente que la bifobia o el monosexismo hagan su aparición también. De aquí que se crea que las personas bisexuales son de una única forma y mesclan dentro de estos estereotipos y prejuicios del el comportamiento sexual o  la conducta sexual como son el que “no son monogamicos”, “son infieles”, “no saben que quieren”, “son promiscuos”, “son inmaduros”, “son cobardes”.  Los bisexuales, son tan diversos como los heterosexuales y los homosexuales. Cada bisexual es diferente entre sí.

Pero como se decía, la bisexualidad no es una minoría numérica de la población[10] y es la capacidad de amar de todo ser humano para amar a otros seres humanos. Es en sí mismo, nuestra base de ser seres sociales ya sea que la tengamos en menor o mayor grado, en una dirección o en la otra.

“[Casi] nadie es 100% homosexual ni 100% heterosexual empezando por que esta orientación sexual varía a lo largo de la vida, por ejemplo: en la niñez muchos han tenido contactos homosexuales, en la adolescencia se asume más la orientación como hetero u homosexual, pero en la edad adulta hay quienes desean experimentar y tener contactos homosexuales ocasionales sin necesidad de serlo formalmente y al revés. Algunos investigadores hablan de que todos tenemos núcleos homosexuales, aunque algunos escojan la conducta heterosexual. Así pues, podemos declararnos heterosexuales y ‘comportarnos como tal’, pero la parte homosexual está siempre latente (aunque sea inconscientemente) y puede mostrarse en forma de sueños eróticos por ejemplo[11]
En realidad, los resultados más objetivos han demostrado que el ser humano es bisexual[12]  y / o pansexual[13] en su mayoría. Es decir, lo que existe es la atracción por otras personas. Y este es también un nuevo reto para las ciencias naturales que se encargan del humano como tal, porque hasta el momento, la investigación de la atracción sexual ha sido sometida al heterosexismo… y entonces ¿será que todos tenemos la capacidad de atraer a otro ser humano sexualmente?[14] Sin duda, más interesante que solo saber cómo atrae la hembra al macho o viceversa. La atracción sexual sigue siendo todo un misterio.[15]
Si nos dedicamos un momento a pensar en términos de Pansexualidad y Bisexualidad vamos a descubrir que tanto la genética, como la biología se meten en líos pues pensar la construcción de hombre que gusta de hombres es  causado por un gen que lo condiciona es como dice Riesenfeld, será que entonces  los bisexuales ¿tendrán medio gen heterosexual? “¿…medio gen homosexual? ¿Un cuarto, tres cuartos? Como se ve, la hipótesis genética se complica”[16]. Lo mismo en términos de Pansexualidad, será ¿Qué una persona tiene un gen que lo condiciona a que le gusten las personas intersexuales? Como vemos, se vuelve ilógico y se comprende mejor el heterosexismo, pues caemos en la cuenta de que no es lógico el régimen de “eres hombre, por lo tanto eres normal si te gustan las mujeres”… ¿Qué misterioso, no? Y sin embargo,  por medio de las observaciones sabemos que la orientación sexual es de nacimiento y se va descubriendo durante la vida. Paradójico.

De esta forma Riesenfeld ha mostrado que la bisexualidad en sí misma es muy diversa y que nuestra sexualidad va de un lado a otro de la escala de Kinsey  a lo largo de nuestra vida y no es estática, ni rigida. Es decir, que a diferencia de la monosexualidad total, los bisexuales de todos los ámbitos siempre pueden esperar sorpresas en sus vidas. De esta manera también nos dice que la sexualidad por lo tanto se descubre a lo largo de la vida. Entonces Riesenfeld también nos dice que de esta forma existen varias formas de bisexualidad:

o   Bisexualidad de vitrina: las personas que tienen tantos miedos y prejuicios que no pueden ni siquiera fantasear con un sexo distinto del que acostumbran [o del que les enseñaron].

o   Bisexualidad en la fantasía: Diferenciado de la práctica sexual y de la atracción. De la fantasía, no necesariamente se pasa a la acción. Algunos deseos, por distintas causas, siempre permanecen en nivel de fantasía, pero en ocasiones la fantasía funciona como ensayo para más adelante explorar en la vida real.

o   Bisexualidad experimental: gente que alguna vez ha tenido experiencias con otro sexo del acostumbrado por diversas razones.

o   Bisexualidad momentánea: algunas personas atraviesan una fase bisexual en un momento específica de la vida, intentando descubrir cómo se sienten mejor.

o   Bisexualidad circunstancial o situacional: para algunas personas la bisexualidad se aparece bajo la forma de cierta circunstancia especial o situación específica que las lleva a encuentros sexuales voluntarios y además placenteros.

o   Bisexualidad especifica: A veces una persona se siente atraída por alguien de “x” sexo que no le había llamado la atención, pero no porque haya empezado a gustarle la gente de ese sexo en general, sino sólo esa persona.

o   Bisexualidad periódica: hay quienes, tras vivir una bisexualidad momentánea o específica, atraviesan por periodos en los cuales su atracción por ambos sexos permanece latente o dormida, sin aparecer acaso ni en la fantasía, y viven como heterosexuales u homosexuales, hasta que de pronto reaparece cuando menos se la esperan. Se descubre así que la bisexualidad no había estado constreñida a un único episodio o un solo momento en la vida

o   Bisexualidad altérnate: hay quienes viven su bisexualidad alternando entre mujeres y hombres, ya sea en la fantasía o en la realidad. Pueden salir con un hombre, luego con otro hombre, luego una mujer, luego otro hombre y después una mujer, por ejemplo.

o   Bisexualidad simultánea: Son las personas que necesitan tener cerca de un hombre y a una mujer al mismo tiempo. Ya sea por fantasía, estar en una relación abierta con dos parejas a la vez (de común acuerdo o no)… o formando tríos (no solo los bisexuales forman tríos). No es necesariamente la bisexualidad más común. [17]
Hay que aclarar que producir mayor tasa de testosterona o de estrógenos no tiene que ver en dicha atracción. Puedes producir muchos estrógenos y atraer a otra persona que produce muchos estrógenos. De la misma manera puedes ser hembra y atraer a otras hembras sin que por eso produzcas “x” cantidad de hormonas masculinas.[18] Ciertamente la embriología moderna ha demostrado que todos tenemos algo de hembras y algo de machos, así como algo de femenino y algo de masculino[19]. Pero ello no implica que por el hecho de sentir atracción por el mismo sexo uno sea  como el sexo contrario o tenga algo del sexo contrario. Nada de eso, es simple atracción, como se suele decir a menudo, es solamente química entre dos personas. Lo mismo pasa con los hombres afeminados heterosexuales, no por fijarse en personas de su sexo contrario van a dejar de ser afeminados ¿cierto?

Sin duda, la teoría Queer ha superado a la sociedad de ahora. Pero las investigaciones en contra ayudan en algo, manejan el presente y de allí no escapan, nos muestran la visión de la gente, sus mitos y prejuicios así como la forma en que  vive hoy la comunidad LGBTTTI dentro de la sociedad heterosexista y como esa sociedad ve con miedo y recelo el fenómeno (de Heterolandia hacia la Nación Queer, la teoría queer a parte de proporcionarnos la teoría del futuro nos proporciona la manera de  vivir de la comunidad LGBTTTI desde la Nación Queer hacia Heterolandia). Por lo tanto nos muestran la visión histórica que nuestros descendientes tendrán de nosotros en el futuro: una sociedad sumamente cerrada que se discrimina a sí misma en el terreno de su propia sexualidad como base de su sociabilidad y desarrollo grupal.

A continuación expongo una lista de los principales precursores de estas teorías:

Otto Weiniger (1903) publica "Geschlecht und Charakter" ("Sexo y Carácter). Para Weiniger, todas las células son sexuadas. Adelanta la teoría de una bisexualidad omnipresente en todos los organismos vivos.[20]
Sigmund Freud: Sostiene que en el ser humano hay una bisexualidad innata. Para él, toda persona, desde el momento de su nacimiento, tiene la capacidad de amar a otra independientemente de su sexo y de su género, de la misma manera como todos podemos sentir placer ante una caricia agradable, sin importar el sexo de quien provenga. [21]
Wilhelm Stekel: La monosexualidad no existe o al menos no es normal, lo normal es la disposición bisexual en estado puro y por motivos múltiples, algunos individuos reprimen uno[22]
Alfred Kinsey (1948-1953): Como consecuencia de su investigación elaboro una escala sobre orientación sexual que dejo atrás el modelo binario heterosexualidad-homosexualidad y abrió un puente de comunicación gradual, en forma de continuo, entre estas dos orientaciones opuestas. [23]
June Reinsisch: sostiene, en base a su extensa experiencia profesional, la existencia de las tres orientaciones sexuales ya citadas: hetero, homo y bisexuales, agregando que “Para algunas personas, la orientación sexual (indicada por el sexo de sus parejas) cambia a lo largo de la vida, pero para la mayoría se mantiene constante”…[24]
Fritz Klein (1985): Creo la llamada cuadricula de orientación sexual de Klein. La escala mide ingredientes tan diversos como práctica sexual, fantasía, preferencia emocional, atracción sexual, preferencia social, identificación personal y estilo de vida. Subrayando que la orientación sexual no es permanente, ni estática y tiene distintas dimensiones. [25]
Xabier Lizarraga (1986): Elabora una tabla con siete denominaciones. I. Fundamentalmente heterosexual. II. Básicamente heterosexual.  III. Preferentemente heterosexual.  IV. Bisexual.  V. Preferentemente homosexual.  VI. Básicamente homosexual.  VII. Fundamentalmente homosexual.[26]

Eli Coleman (1986): Realizó un amplio cuestionario que toma en cuenta todavía más aspectos para un completo entendimiento de las diversas orientaciones sexuales. Tanto Kinsey como Klein, Lizarraga y Coleman entienden la bisexualidad solo lo que aparece en la parte central de las tablas, con un sentimiento de atracción de la misma intensidad hacia ambos sexos. [27]
Andrés Castuera (1995): partido de la teoría freudiana de la bisexualidad innata para conceptualizar como la “no-preferencia sexual”. Él explica que la palabra preferencia tiene que ver con elegir una de las dos opciones: heterosexualidad u homosexualidad. En la bisexualidad no se elige, sino que ambas están presentes. Para Castuera, la bisexualidad no se adquiere sino que se pierde; mediante esta pérdida se da la inclinación preferente hacia uno lado o hacia el otro. [28]
Robert Epstein: considera que la variación en la orientación sexual de la pareja macho/hembra a hembra/hembra o macho/macho podría ser genéticamente normal. Las conclusiones de este investigador americano sugieren que muy poca gente es verdaderamente homosexual o heterosexual, y que en la mayor parte de los casos podemos sentirnos atraídos por personas de nuestro mismo sexo a pesar de considerase heterosexual, o del sexo contrario, a pesar de considerarnos homosexuales. [29]
Umberto Veronesi: declara que dentro de tres generaciones la humanidad evolucionará claramente hacia un predominio de la bisexualidad ya que en el futuro el sexo tendrá una función más de afecto o de placer que reproductiva y, por lo tanto, según el médico, será indistinto si se tienen relaciones sexuales con personas del mismo u otro sexo.[30]
Santiago de la Iglesia Turiño: Los hombres compartimos más del 95 % de nuestro genoma con los chimpancés somos más inteligentes y sin embargo somos mucho menos violentos. En los dos grupos de chimpancés existentes (chimpancés y chimpancés enanos o bonobos) la socialización es muy diferente según su sexualidad, los bonobos pansexuales (tienen relaciones sexuales con los dos sexos) son feministas y pacíficos. Los chimpancés heterosexuales son machistas y extremadamente violentos. Lo que da pie para rescatar la teoría de Alfred Kinsey sobre la bisexualidad graduada en los humanos, y proponer que si no somos tan violentos como nos correspondería por nuestra inteligencia es porque el ser humano es bisexual. Según la primatóloga Sarah Blaffer Hrdy si hoy podemos subir a un tren o un avión lleno de hombres y mujeres desconocidos es porque la violencia en nuestro grupo de primates esta mitigada. Para la primatóloga un chimpancé tendría suerte si al bajar del transporte se despide del grupo de congéneres desconocidos con todos los dedos de las manos y de los pies en su sitio[31]
Rinna Riesenfeld: Mantiene que es bisexual quien experimenta atracción o afecto hacia hombres y mujeres, sin importar que haya una mayor inclinación hacia algún sexo en particular al contrario de otros investigadores (que toman dichas inclinaciones como un matiz heterosexual u homosexual). Y crea una tabla más complicada que complementa la visión de Kinsey, Klein, Lizarraga y Coleman que puede incluir pasado, presente y futuro.[32]   

Oscar Guasch: en sus escritos el menciona en varias ocasiones que la sexualidad está condicionada por la sociedad. Entre ello se rescatan sus conclusiones de tecnología relacionada con la sexualidad en cuanto a reproducción [también la reproducción está condicionada socialmente], y que en un futuro lo que quedaran serán relaciones entre personas (que den su consentimiento)  por el simple gusto de tenerlas. [33]
Margaret Mead: Lo nuevo no es la bisexualidad, sino el poder expandir nuestra aceptación y darnos cuenta de la capacidad humana para el amor sexual… basta con una mirada superficial a cualquier sociedad o grupo humano para convencerse de que existe un gran número de personas diversas, la mayoría de las cuales probablemente son bisexuales en su potencial y su capacidad de amar. Por eso, podemos equivocarnos si seguimos basando nuestro entendimiento de lo sexual únicamente en la heterosexualidad y en la homosexualidad, ignorando la inmensa diversidad de expresiones de amor entre las personas[34]
Lucila Soriano: Pienso que nacemos bisexuales y son nuestras circunstancias y los condicionamientos socioculturales lo que nos permite explorar o descubrir esta bisexualidad. Dado que vivimos en un mundo heterosexista, muchas personas jamás se van a plantear la posibilidad de amar o de tener contacto sexual con otras de su mismo sexo, ya sea porque sus experiencias heterosexuales han sido positivas o simplemente porque tienen cancelada su área homosexual. Al nacer, todos tenemos un potencial bisexual que podemos desarrollar o no a lo largo de nuestra vida, según las experiencias que se nos presenten y el grado de apertura que podamos tener para tomarlas. [35]



Así pues, pongo de manifiesto la Tabla Kinsey – Lizárraga también conocida como el Informe Kinsey o  Escala de Kinsey:[36]
* (La escala se puede manejar del 0 al 6 o bien del 1 al 7. Manejaremos la segunda opción).


1. Heterosexual (monosexual):

Fundamentalmente heterosexual. // Sólo con personas del otro sexo // exclusivamente heterosexual


2. Heteroflexible en 1er grado:

Básicamente heterosexual. // Ocasionalmente del mismo sexo // Predominantemente heterosexual y solo incidentalmente homosexual  // Bicurioso


3. Heteroflexible en 2do grado:

Preferentemente heterosexual // Preferentemente con personas del otro sexo // Predominantemente heterosexual y con experiencias homosexuales más que incidentales // Bicurioso


4.  Bisexual.

La misma atracción por ambos sexos // Igualmente heterosexual y homosexual


5. Homoflexible en 1er  grado:

Preferentemente homosexual.  // Preferentemente con el mismo sexo //  Predominantemente homosexual y con experiencias heterosexuales más que incidentales // Bicurioso


6. Homoflexible en 2do grado:

Básicamente homosexual.  // Ocasionalmente con el otro sexo // Predominantemente homosexual y solo incidentalmente heterosexual // Bicurioso


7. Homosexual (monosexual):

Fundamentalmente homosexual.  // Solo personas del mismo sexo. // Exclusivamente homosexual // Bicurioso.

X – Asexual

De la misma manera que hay personas a las que les da igual el físico genital, hay otras que por el contrario lo que les gusta de una persona es que sea masculino o femenino (es decir, su carácter, sus comportamiento de genero) sin importar su sexo biológico.[37]
El conocimiento de la Escala de Kinsey nos muestra más claramente el abundante heterosexismo que hay en la sociedad. ¿Usted cree que entre tantas opciones es común que haya solo una predominante y más en esa gran cantidad? Además, por el simple hecho de presuponer que nacemos bisexuales el heterosexismo es más fácil de entender y ver.

Y es más, constantemente vemos la homosociabilidad y el homoerotismo en la sociedad en conjunción de la heterosociabilidad y el heteroerotismo, entonces ¿Por qué solo se muestra una relación en las calles y en los medios de comunicación? No es que no la haya, es que la hay y se muestra, pero una es invisibilizada en función de la otra por creerla mejor.

Que no se muestre es por mitos, prejuicios y la falta de información y educación de la población en general. Es muy fácil alimentar a la gente de doxas pero difícil el hacer pensar y criticar. Es por ello que una mujer más un hombre son una pareja valida y respetable, pero no es la única opción de relación que se puede encontrar  personalmente, esta escala y las teorías que no han tenido un borrado bisexual nos muestran que es igual de fácil formas parejas heterosexuales como homosexuales y probablemente en la misma cantidad que las primeras. Lo único que nos separa de esa diversidad es la jerarquía o el régimen del heteropatriarcado cuyo buen amigo, que ya hemos mencionado, es el heteroseximo.

Escala de Kinsey modificada con los términos actuales y simplificados. La preferencia pansexual rodearía todo el esquema. Según esto, la especie humana oscila durante toda su vida en menor o mayor grado del centro a una de los extremos. Prueba de ello son nuestras expresiones en los diversos medios de comunicación y la vida diaria, en el arte y en la ciencia en general. Pero que es invisibilizada para promover solo un extremo de esta escala. Los menos adaptables en este caso son los monosexuales, los cuales no se pueden mover, son rígidos y poco flexibles para el manejo de la sociedad y la economía. En nuestra sociedad no se aprecia dicho fenómeno en los monosexuales heterosexuales porque son los más favorecidos por el sistema al contrario de los monsexuales homosexuales.





[1] Para otros hay más orientaciones sexuales, algunas de ellas creo que se confunden con la conducta sexual. Y otras no están aceptadas más que como parafilias. Sin embargo, como se  verá más abajo ofrezco una visión de este fenómeno en cuanto a otras especies y cosas, puesto que quiero ser plural y objetiva, tanto como la sociedad actual me lo permite, sin embargo debido a la gran confusión y prejuicios que existen en el tema decidí no ponerlas como tal en este análisis. En cuanto a la pedofilia, me parece que es una conducta sexual ya que no tiene que ver con ¿Qué sexo te gusta? Ya que se da independientemente. Mas si tiene que ver con ¿Cómo te gusta? Sin embargo, de alguna forma todos tenemos todas estas preferencias sexuales en mayor o menor intensidad debido a prejuicios o por un hecho biológico.
[2] También se puede conocer como Pansensual: poder experimentar placer sensual con ambos sexos independientemente si con alguno más que con otro. RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 84
[3] orientación sexual humana, caracterizada por la atracción estética, romántica o sexual por otras personas independientemente del sexo y género de las mismas. Por lo tanto, los pansexuales pueden sentirse atraídos por hombres, mujeres y también por aquellas personas que no se sienten identificadas con la dicotomía hombre/mujer o con la de masculino/femenino, incluyendo así, por ejemplo, a intersexuales, transexuales e intergéneros. También se describe como la capacidad de amar a una persona románticamente con independencia del género (que no es lo mismo que sexo biológico) En: COLABORADORERS de Wikipedia. Pansexualidad. Wikipedia, la enciclopedia libre. http://es.wikipedia.org/wiki/Pansexualidad. Consultado el 25 de mayo del 2010   //   tener la capacidad de responder ante distintos estímulos físicos sin distinguir de quien o de qué provengan, sino simplemente si el estímulo fue agradable o no. Se dice que nacemos pansexuales, ya que un bebé elabora el placer en función de si resulta agradable, no en función de donde provenga. RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 84.

Los pansexuales afirman que para ellos el sexo y el género son conceptos vacíos de significado o que no tienen importancia. La pansexualidad es independiente de los tipos de amor que se puedan profesar. Los pansexuales pueden sentirse atraídos por otras personas en diversos planos románticos. Los pansexuales proponen una definición basada en la atracción por la persona (o por los humanos, en general). A pesar de su orientación sexual sin distinciones entre géneros, los pansexuales pueden sentir preferencias por un tipo concreto de persona. Se ha afirmado que la pansexualidad no es un concepto metafísico (relacionado con la mera atracción entre personas), sino más bien una atracción a lo esencial por personas con independencia del género de estas. Una persona puede considerarse a sí misma pansexual cuando se puede sentir atraída amorosamente por cualquier tipo de personas en general, se podría decir que se fijan en el interior.

Otros términos son: Trisexual - A veces trysexual, es o bien una ampliación o un juego de palabras con bisexual. En su uso más grave, indica un interés por las personas transexuales, además de los hombres y mujeres que son cissexuales. En su uso más humorística, se refiere a alguien que intentará cualquier experiencia sexual. Polysexual - Las personas que se sienten atraídos por más de un género, pero no quieren a identificar como bisexual, porque implica que sólo hay dos sexos. Polisexual son aquellas personas sexualmente atraídas a muchas y  diferentes tipos de ideas y características o que no encasillan el objeto de deseo en una sola dirección.
[4] es uno de los primeros términos en surgir en la terminología moderna de la sexualidad, allá por el 1997. Rechaza las etiquetas convencionales de heterosexual u homosexual al considerar que el tema de la orientación sexual de cada uno está superado. Surgió dentro de la comunidad homosexual en contra de los estereotipos acuñados. Algunos lo confunden como un sinónimo de bisexual, pero más que eso se refiere a una persona que no se identifica con ninguna orientación sexual: las disfruta todas. Es un neologismo que surge del griego "pomo", abreviación de postmoderno lo que identificaría una sexualidad postmoderna. En:  COLABORADORES de Wikpedia. Pomosexual. Wikipedia, la enciclopedia libre. http://es.wikipedia.org/wiki/Pomosexual. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[5] Sin embargo, la asexualidad es más semejante a la hipersexualidad. Es decir, sería más un comportamiento sexual porque tiene que ver con ¿Cómo te gusta?, y no ¿con que sexo te gusta? La asexualidad tiene tres salidas: tener relaciones sentimentales (con una persona ya sea hembra o macho o si uno se identifica como mujer u hombre) sin tener relaciones sexuales  –que nada tiene que ver con el celibato (asexualidad no es lo mismo que el celibato, que es la abstención deliberada de la actividad sexual; muchos asexuales tienen relaciones sexuales, y la mayoría de los célibes que no son asexuales)-; que no te gusta ningún individuo ya sea hembra o macho (aquí si tiene que ver con preferencia sexual); o que  en definitiva no se tiene ningún deseo sexual y /o afectivo.
[6] RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 94
[7] RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p 94 - 99
[8] REDACCION de ANODIS. ¿Todas las personas somos bisexuales?. ANODIS.  30 de enero de 2006 http://anodis.com/nota/6315.asp. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[9] En este sentido, vale recordar aquí las dimensiones de la sexualidad, teniendo presente que esta es, en primera instancia, algo muy personal, parte de nuestro yo irrepetible. Por tanto, dada su riqueza y pluralidad, cualquier intento de clasificarla, normatizarla o encerrarla en moldes ya hechos, resulta artificial y solo nos conduce a una imagen deformada… la tendencia compulsiva a clasificar a las personas partiendo de estándares o promedios, obviando su individualidad como seres sexuados, desemboca irremisiblemente en la intolerancia sexual y la insensibilidad frente a sus necesidades y anhelos. GONZÁLEZ, Alicia; Castellanos, Beatriz. Sexualidad y géneros. Santa Fe de Bogotá, Colombia: Cooperativa Editorial Magisterio, 1996. (Colección Mesa redonda). p. 27.
[10] Todos los estudios que se citan en “Bisexualidades: entre la homosexualidad y la heterosexualidad” apuntan a que la población bisexual es mucho más grande de lo que parece, dado los diversos factores que impiden que los bisexuales se identifiquen como tales pese a que su práctica sexual y sus inclinaciones apunten en este sentido. Según su momento de vida, los bisexuales en ocasiones quedan diluidos en la población heterosexual o en la homosexual [monógama]. Por miedo a ser juzgados o discriminados, optan por no hablar de sus sentimientos o actos bisexuales. Esto explica en buena medida que parezca que hay menos personas bisexuales de las que realmente hay. En: RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 68.
[11] Todos somos bisexuales. Mujeres en el mundo: Un sitio de encuentro para tratar todo tipo de temas. Noviembre 13 del 2009. http://mujeresenelmundo.crearblog.com/2009/11/13/todos-somos-bisexuales/. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[12] Castuera nos dice que la bisexualidad no se adquiere sino que se pierde; mediante esta pérdida se da la inclinación preferente hacia un lado o hacia el otro. En: RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 31.
[13] Otros investigadores creen que nacemos pansexuales, es decir, con la aptitud de reaccionar agradablemente ante cualquier tipo de estímulo En: RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 31.
[14] Porque en muchas ocasiones se dice que nacemos con la capacidad de sentir atracción por ambos sexos y que realmente no nos sentimos atraídos por uno u otro sexo, sino por unas u otras personas.
[15] A pesar del empeño de los científicos en averiguarlo, aun no se sabe cómo se pone en marcha el mecanismo de atracción entre personas del mismo sexo [y por ende quedan inconclusas las investigaciones de cómo se pone en marcha el mecanismo de atracción entre personas del sexo opuesto. En resumen, no se sabe cómo se produce la atracción sexual entre personas a ciencia cierta]. Lo que sí está claro es que no es elige [la monosexualidad. La bisexualidad puede aceptarse -paradójicamente, es cierto, que tampoco se elige-, pero también puede ser invisibilizada en función de uno u otro régimen] En: RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 81.
[16] RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 27
[17] RIESENFELD, Rinna. Op. Cit.,  p. 105 - 115
[18] Concretamente, la homosexualidad no guarda ninguna relación con los niveles hormonales. Las hormonas femeninas y masculinas pueden cambiar aspectos físicos externos, nunca los sentimientos. Una mujer con exceso de testosterona puede tener vellosidad más abundante o una voz más grave. A un hombre que ingiera estrógenos se le adelgazara la piel, le crecerán los pechos, se le agudizara la voz. Pero ni una ni otro cambian de orientación sexual debido al aumento de hormonas sexuales. En. RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 80
[19] Todos somos bisexuales. Op. Cit.
[20] RETRATOSDELAHISTORIA. Historia de la homosexualidad -7. Retratos de la Historia .http://retratosdelahistoria.lacoctelera.net/post/2006/11/05/historia-la-homosexualidad-7- Consultado el 25 de mayo del 2010.
[21] COGAM. Bisexualidad. COGAM. 20 de Abril 2007 http://www.cogam.org/resourceserver/1581/d112d6ad-54ec-438b-9358-4483f9e98868/a75/rglang/en-US/filename/guion-bisexualidad.doc. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[22] HERNÁNDEZ Reyes, José Antonio. Breve historia de la concepción de un deseo invisibilizado: la Bisexualidad. Programa de Estudios sobre Disidencia Sexual. http://www.disisex.org/documentos-disidencia-sexual/iii-encuentro/7/antonio-hernandez.pdf. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[23] COGAM. Op. Cit.
[24] SUBIRANA, Roberto. Moral… o moralina discriminatoria. Revista Persona. http://www.revistapersona.com.ar/Persona19/19Subirana.htm. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[25] COGAM. Op. Cit.
[26] COGAM. Op. Cit.
[27] COGAM. Op. Cit.
[28] RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 31
[29] DE LOS MARES, Reina. ¿Todos somos bisexuales?. EducaSexo: Blog sobre educación sexual, sexo… 20 de Enero de 2008. http://www.educasexo.com/noticias/%C2%BFtodos-somos-bisexuales.html. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[30] REDACCION de ANODIS. Asegura Cientifico que todos somos bisexuales. ANODIS. 3 de febrero del 2009. http://anodis.com/nota/13534.asp. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[31] ARIEL, Alan. ¿Por qué la Bisexualidad nos hace humanos?. UniversoGay. 18 de septiembre del 2009. http://libros.universogay.com/por-que-la-bisexualidad-nos-hace-humanos__18092009.html. Consuultado el 25 de mayo del 2010.
[32] COGAM. Op. Cit
[33] GUASCH, Oscar. Op. Cit.
[34] RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p . 86
[35] RIESENFELD, Rinna. Op. Cit., p. 86
[36] RIESENFELD, Rinna. Papa, mama soy gay: una guía para comprender las orientaciones y preferencias sexuales de los hijos. Mexico : Grijalbo, c2000 . (Sentido Contrario) ; COLABORADORES de Wikipedia. Sexualidad en grados (Kinsey). Wikipedia, la enciclopedia libre. http://es.wikipedia.org/wiki/Sexualidad_en_grados_(Kinsey). Consultado el 25 de mayo del 2010; SÁNCHEZ González, JoseF. Escala Kinsey de heterosexualidad y homosexualidad. Blog de My Space de José F Sánchez Gonzales. sábado, octubre 18, 2008. http://blogs.myspace.com/index.cfm?fuseaction=blog.view&friendId=126948418&blogId=441939909. Consultado el 25 de mayo del 2010.
[37] En ocasiones se ha definido la bisexualidad como una atracción asexual o agenérica, en el sentido de que ni el sexo ni el género de la persona importan, sino que la atracción se basa en otros aspectos, como la personalidad, la forma de ser, la belleza física, la forma de pensar, entre otros. Está claro que para homosexuales y heterosexuales, el sexo de la persona que les atrae es una condición indispensable [no así para los bisexuales y  pansexuales]

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Muy interesante el artículo! Gracias por informar.

free counters